¿Cuánto ha cambiado la ropa interior desde sus origenes?
En los inicios de los tiempos, se fabricaban prendas con los materiales que se tenían a la mano, como pieles u hojas que se tejían para darle forma, por lo que los primeros avistamientos de la ropa interior se reducían a taparrabos rudimentarios. Se han encontrado pruebas de que la ropa interior femenina como la conocemos ahora se remonta a los egipcios, quienes utilizaban una especie de pañal para proteger sus genitales.
A través de los años, la ropa interior paso de ser una prenda utilitaria a ser distintivo de clases sociales, como en la antigua Roma donde solo las mujeres de la nobleza lucían arneses de oro que sostenían sus pechos. En la Edad Media la iglesia exigía que se cubrieran los cuerpos, ya que se consideraba pecaminoso y que debía ser ocultado, a pesar de eso fue la era donde se popularizó el corsé, una de las prendas más sexys de la historia.
En el siglo XIX aparecieron las medias y los ligueros lo que empezó a definir la gran diferencia entre la ropa interior femenina y masculina, pues la ropa íntima se fabricaba en los mismos materiales y con siluetas muy parecidas para hombres y mujeres. Para el siglo XX la ropa interior evolucionó a pasos agigantados volviéndose más práctica, cómoda y experimentando con distintos materiales. Tras la crisis económica de 1929 se optó por crear prendas con menos tela para reducir costos debido a la escasez de materiales, fue donde los calzoncillos de hombre que llegaban hasta la rodilla fueron acortados y se creó el primer boxer corto para hombre. En 1940 se popularizó el sujetador y se volvió una prenda icónica para las mujeres, pues proporcionaba soporte y las hacia lucir más atractivas.
A finales de los 60’s hubo protestas feministas en donde quemaban sostenes por considerarlos “símbolos de opresión”, a partir de entonces los diseños se volvieron más versátiles, divertidos y sexys. En los 80’s la ropa interior tuvo un auge inesperado debido a artistas como Madonna, quien lucia los sostenes como parte de su vestuario, además con el auge del fisiculturismo y la estética fitness, se empezaron a desarrollar materiales flexibles aptos para el deporte, por fin la ropa interior era sinónimo de comodidad y funcionalidad.
Actualmente la ropa interior para mujer apunta al confort y la innovación en sus textiles, se busca que brinden algo más que
una apariencia bella y que otorguen beneficios extra, como materiales biodegradables
o resistentes a las manchas con diseños minimalistas que se puedan usar diario. La tendencia sport esta al
alza y por eso las siluetas sencillas y practicas son las preferidas, ya que no
solo transmiten sensualidad sino también empoderamiento y diversión.